Tricotar con lana de perro

Sí, has leído bien. Se puede tricotar con pelo de tu perro. Para ello es necesaria mucha paciencia para ir acumulando la lana desprendida durante los cepillados. Pueden pasar años hasta alcanzar la cantidad necesaria.

Para que te hagas una idea, si lo que quieres son unos guantes necesitarás unos 100 gramos de pelo, antes de su hilatura y para un jersey algo más de un kilo.

Probablemente ya estarás pensando qué ocurre con la prenda cuando se moja ¿huele a perro mojado?. Los artesanos que se dedican a ello garantizan que no. Advierten que es muy importante ir guardando el pelo limpio y seco en bolsitas transpirables y seleccionarlo en función del largo, la zona del cuerpo y su dureza. Por supuesto, el resultado dependerá del pelaje de cada perro.

Aunque te pueda parecer una idea disparatada, porque para nosotros los perros son mascotas, su pelo se utilizó durante años por los nativos americanos. El chiengora, o hilado de pelo de perro es hasta un 80% más cálido que la lana, muy suave e impermeable.

Si te animas a probar la experiencia con una rápida consulta en la red encontrarás tutoriales que te explican paso a paso cómo hacerlo o, si prefieres, puedes solicitar a un artesano que lo haga por ti. Sea como sea seguro que te hará ver los pelos de tu perro de otra manera.