Las fiestas mejor sin ruido

Cuando se hace sufrir a otro deja de ser divertido. Aunque la pirotecnia es sinónimo de fiesta y alegría, las consecuencias de los ruidos pueden resultar muy perjudiciales tanto para animales como para personas con hipersensibilidad acústica.

La capacidad auditiva de nuestros animales de compañía es superior a la nuestra, pudiendo escuchar sonidos que para nosotros resultan imperceptibles. Una de las fobias más frecuentes en los perros es a los ruidos fuertes como truenos, petardos o fuegos artificiales. Existen numerosos estudios sobre el estrés que les supone, las reacciones y sus consecuencias.

Un ensayo llevado a cabo en la Universidad de Bristol concluye que aproximadamente la mitad de los perros urbanitas sufre alguno de los síntomas relacionados con explosiones de petardos y señala que los perros de mayor edad son más propensos a mostrar un comportamiento temeroso en respuesta a los ruidos.

El neurobiólogo especializado en comportamiento canino, Dr. Berns, equipara el terror que pueden llegar a sufrir al estrés post traumático vivido por los humanos.

La reacción ante un ruido estruendoso varía dependiendo de cada animal. Puede ir desde la indiferencia total hasta la intranquilidad o un estado de ansiedad intenso. Quedarse literalmente paralizados o sufrir tendencia a escapar. Salivación, taquicardias, ladridos, micción, rabo entre las patas… son signos también del estrés que están sufriendo.

En el caso de los gatos, normalmente tratan de ocultarse o simplemente escapar.

Algunas ciudades apuestan ya por los fuegos silenciosos y estos días es noticia que algunos comercios minoristas de Alemania han decidido renunciar a la venta de petardos y otros artículos pirotécnicos porque «queremos el bienestar animal y el aire limpio los 365 días del año».

Protectoras, organizaciones veterinarias y de defensa del bienestar animal promueven campañas como #pirotecniacero  #NoALaPirotecnia #noseaspetardo #mejorsinpetardos a las que Somos Pet Friendly se une a favor del bienestar animal y la convivencia armoniosa y respetuosa.